Take it easy
Algunas veces ...
el tiempo se detiene,
losespaciosseamontonan,
el presente colapsa,
y el drama es una bola de nieve.
But then ...
¡I take it easy!
cups
sábado, julio 08, 2006
-9:53 a.m.
Florencia

Sin duda el viaje de Paris a Florencia de tarde-noche en tren se quedará impregnado en mi retina por mucho tiempo. Desperté en Florencia respirando Italia el más latino de los tres países que visité. Florencia es la postal exacta de la globalización de la cultura, una plaza impresionante en historia, cultura y arquitectura en casi cada esquina, un río multicultural y multirracial por cada una de sus estrechos callejones en los que siempre queda aún espacio para un minúsculo auto. Florencia y los vendedores de fakes de diseñadores, de copias de obras artísticas, de acuarelas, poblando casi todos los espacios disponibles y dispuestos siempre a regatear hasta el límite evitando a toda costa que devuelvas algo que te atrevas a tomar.

En Florencia se encuentra el David vestido de Dolce & Gabanna, La Venus naciendo vestida de Prada y una academia en cada esquina como el pretexto perfecto de un curso de verano en la cálida y aunque pequeña, interminable Florencia.
Roma
Roma es a pesar de la intolerancia de las estatuas eunucas del Vaticano y sus negativas ante los referéndums que pueblan sus calles buscando apertura, una ciudad arrolladora, atrapa desde el inicio, muestra toda su riqueza histórica, la vida que ha girado desde siempre en cada uno de sus monumentos, sus edificios, sus plazas e incluso sus ruinas. Roma es como una mujer católica en todo su exterior pero que por dentro derrama pasión y entonces Roma espera que llegue la noche para dejar salir sus deseos retenidos, para dejar la cordura de lado y poblar las plazas, las fuentes, de arte, de música, de cerveza, de desfogue, de libertad, de fiestas carnales, haciendo que sus calles rememoren el Gran Coliseo.

Y entonces Italia se perfila para las finales y la Plaza de la Victoria se llena de banderas tricolores, los miniautos hacen ruido junto a las interminables filas de motociclistas y todos somos italianos. De Italia me quedaré además con una anécdota personal trascendental, donde sobresale la humanidad, hospitalidad y buena voluntad de su gente. Vamos Forza Italia
Etiquetas: Fotografía, Personales
by R.Castillo