Desafuero:PEJE el toro es inocenteNo vaya usted a pensar que el mismo día de los funerales de Carol Wojtyla fue elegido para dar la estocada final a todo un circo romano implementado para desaforar a Andrés Manuel López Obrador, y que de la misma forma en que se organizó una marcha en contra de dicho proceso, se organiza a la par otra por la televisión mexicana para decirle adiós al papa. No, estos son otros tiempos, sólo es coincidencia, el presidencialismo es cosa del pasado, hoy en su lugar habita la insignia del estado de derecho, no se trata de frenar al líder en las encuestas si no de que la justicia, esa mujer con balanza en mano y vista cubierta, se abra paso y se aplique en un hecho gravísimo, inconcebible, de inconmensurables dimensiones. Sobre dicho desacato por todos conocido Carlos Fuentes señala:
A la luz sombría de nuestro pasado remoto y reciente, el incumplimiento de una orden judicial sobre asunto menor por el Jefe de Gobierno del DF parece, a todas luces, menor. Si fuese parte de un combate frontal, sin cuartel y sin excepciones, a toda forma de desacato, se entendería mejor. Pero el juicio político contra el Jefe de Gobierno no se funda en asunto mayor sino menor, menos que menor, tan menor que el público tiene derecho a pensar -como lo hace- que la sacralidad legal invocada a cada paso por el Presidente de la República, el Secretario de Gobernación y el Procurador General es oportunista, falaz y escondrijo retórico -hoja de parra legalista- de un propósito político cada día más evidente: vedarle el camino a la Presidencia en 2006 al actual Jefe de Gobierno del DF.Y es que la bandera del estado de derecho que se aplica al caso, es una burla del sistema, a la sombra de crímenes políticos, desapariciones, robos a manos llenas de servidores públicos en todos los niveles, corrupción, fraudes, etc. La construcción de un auténtico Estado de derecho supone que la ley se aplique de manera estricta, sistemática y universal. Sí, y aunque usted no lo crea, por más risible que parezca el caso de
El Encino,
los diputados del PAN del DF, ya tienen un cargo más bajo la manga, de la misma “gravedad”, a los acomedidos legisladores panistas no se les permite entrar como si lo hacen todos los periodistas, a las conferencias matutinas que hasta ayer daba AMLO, por lo que prestos solicitaron un amparo sin que por eso los dejaran entrar de mirones a las charlas mañaneras, lo que generó la pauta para un nuevo proceso judicial. Sin duda tenemos una justicia sui géneris y unos legisladores de primer mundo, lo importante es lo importante, ¿o qué no?.
La actitud reaccionaria y viola leyes de AMLO no es lo único que objetan sus adversarios, tienen otros argumentos, subjetivos la mayoría, basados en hipótesis más que en hechos, previendo un gobierno populista que frenará el crecimiento económico del país y aumentará la deuda pública, lo segundo puede ser posible, lo primero imposible, debido a que no existe crecimiento económico en el país, el único crecimiento existente es el de la desigualdad, en el que en el mismo terruño puede habitar el
cuarto hombre más rico de la orbe y millones de pobres que no tienen siquiera lo necesario para subsistir. Existen teorías que lo comparan con Hugo Chávez, figura que deberíamos admirar al poder resistir los embates de los Estados Unidos, y que sin embargo es sólo un ardid maquinado teniendo como excusa el origen izquierdista del
segundo mejor alcalde en el mundo del 2004, según
World Mayor.