el tiempo se detiene,

losespaciosseamontonan,

el presente colapsa,

y el drama es una bola de nieve.


But then ...


¡I take it easy!

Pero no sólo es la blanca navidad lo que me ha elevado mi grado de felicidad, es además esa mezcla de sensaciones propias de un fin de año, pero que hoy van más allá de una remembranza de impotencias, a una sonrisa disimulada, pero tampoco es la la única noticia.

¿Sabías que MSN ya sacó su servicio de blogs? Que incluye además de posts, un actualizador de páginas automático, un fotoblog, un sistema de estadísticas y otras atribuciones, todo en una sola cuenta. Las desventajas, la poca personalización que puede lograrse, ya que no puede editarse directamente el template. Lo conocí hoy, habrá que darle tiempo a este sistema que promete, debido a que ya conocemos el power de MSN.

Por último tengo que anunciar, que el baño se nos va, empezamos año con nuevo concepto en Sin Pretensiones, claro está que el cambio se refiere solo al template y sus conexos. Así que siéntense y disfruten los últimos días del baño, al que algunos tuvieron la amabilidad de traer papel de cuando en cuando. Gracias a todos y a cada uno. Espero aguantar otro año de blogger, o al menos ganarme el adjetivo.

Gracias otra vez, y nos vemos el próximo año. Se reparten abrazos.

Mañana seguramente me daré cuenta ...
de que hoy no sé nada.

Etiquetas: Poemas

Inminente diciembre.

Sin querer caer en la cuenta todavía, diciembre va como una ráfaga al encuentro del próximo año, que aún siquiera el pronunciar el número, me causa ya una esquizofrenia natural y una aversión por una cuenta regresiva que quisiera que se prolongará lo más posible, pero que la ansiedad misma, hará todavía más fugaz. Hacer una retrospectiva de lo que fue un año, para realizar recuentos, además de ir en contra de mi naturaleza, se me hace, desde antes de emprenderla, una tarea inútil, sabiendo de antemano que el año poco me ha dejado y también yo, poco he dejado. Hay como en todo, algunas excepciones.

Y casi al final, me veo, varado en una meseta, que no si sí es inclinada o ascendente, en donde me envuelve una mezcla de nihilismo, pereza, indolencia y mediocridad recién descubierta, producto de la desvirtualización de cualquier cosa que parezca tener valor; círculo que me ha envuelto y me ha azotado en la cara mi vulnerabilidad, no, nunca he tenido el control, aún cuando el oído me llena la cabeza de gritos que aseguran que el próximo año será una buena oportunidad para reacomodar la escalera, quizá sí, prefiero creerlo así, sobre todo cuando esperar, parece ser lo único viable, y dormitar un mes más, nunca está de más.

"El próximo año será mejor", repite mi innegable mexicanidad, habrá que echarle la culpa a mis genes y a esta cultura que me ha amamantado. Aunque esta vez, sé que el año por venir es definitivo para demasiadas cosas, que tendré que aprender a no posponer.

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Dos realidades navideñas:

• Es tal la crisis, que mis vecinos, para que les alcanzaran las luces navideñas, tuvieron que podar el árbol.
• Mi carro no podría ser más navideño, le prenden todos los foquitos del tablero.